Las lluvias trajeron alivio a zonas afectadas por  la sequía 

Las últimas lluvias trajeron alivio a las zonas afectadas por la sequía, principalmente nuestra región, para alegría de los productores.

En nuestra región las lluvias alcanzaron un promedio de 70 milímetros, lo que generó un gran alivio en los campos agrícolas, sobre todo en aquellos bien provistos de rastrojos (que pueden aprovechar mejor el agua caída). 

El agua cayó desde el sábado en muchos distritos, con un violento temporal de viento, que descargó lluvia sobre gran parte del territorio provincial, sobre todo en Bahía Blanca, Monte Hermoso, Pinamar, y otras ciudades.

En Coronel Pringles, la precipitación hasta el cierre de nuestra edición, en los dos días, registró 70 milímetros; en algunas zonas el registro fue menor  y en otras pasaron los cien.

Si bien la tormenta llegó tarde para el campo, que ya sufrió cuantiosas pérdidas, por los incendios, la falta de pasto, y para los miles de animales muertos, servirá para recuperar las pasturas en buena parte del territorio.

Lo increíble, que el temporal produjo anegamientos en diversas ciudades, voladuras de techos, caída de columnas y carteles. Pero la algarabía colectiva por la lluvia restó importancia a estos inconvenientes.

Lo cierto es que las lluvias caídas en las últimas horas en no solo en nuestro distrito, sino también en la región,  trajeron alivio para los productores agropecuarios,  que estaban preocupados y nerviosos, porque venían  sufriendo desde hace meses una sequía de peor grado, que se sumó a los focos de incendios que diezmaron campos y hacienda  con el costo económico que ello representa.

Reiteramos, en Coronel Pringles, la precipitación fue de 70 milímetros. El mayor registro lo  obtuvo Huanguelén con 140 milímetros, y Pasmann y Cascada, con 200 mm.

El panorama ganadero sigue siendo el más comprometido en virtud que con la sequía que se registró, no se pudieron reponer pasturas, ni hacer almacenamiento de forrajes y el productor se vio obligado a vender la hacienda, señalan la gente de campo, que ha salido a vender muchos animales, antes de que le vengan a menos,  y a su vez, ante las necesidades impositivas y demás, muchos se vieron en la obligación de deshacerse de vientres.

Superada por el momento la crítica situación,  empezaron a circular esperanzados mensajes de los productores.

LLUVIAS

Finalmente los productores agropecuarios pueden respirar profundo ya que en toda la zona llovió de buena manera ante la necesidad inminente que había de agua en los suelos. Conocé los diferentes registros de establecimientos rurales y de localidades aledañas:

Coronel Pringles 70 mm

Establecimiento Cumaná 80 mm

La Alfalfa 50 mm

La Catalina 70 mm

El Inca 70 mm

Gral Alvear 100mm

Sierra de la Ventana 60

Bahía Blanca 70 mm

Tornquist 85 mm

Laprida 95 mm

Saldungaray 60 mm

Coronel Falcón 30 mm

Pigüé 93 mm

Ascazubi 71 mm

Arroyo Venado (Guamini) 82 mm

Tres Arroyos 35 mm

De la Garma 70 mm

Copetonas 70 mm

San Cayetano 32 mm

G. Chaves 72 mm

Puan 90 mm

Saavedra 90 mm

Dorrego 66 mm

Chasico 85 mm

Huanguelen 140 mm

Pasman y Cascada, 200 mm.