Jóvenes de nuestra ciudad fueron parte del "lío" que se hizo en Rosario

Más de 18.000 jóvenes participaron, del 25 al 27 de mayo, en el II Encuentro Nacional de Juventud realizado en la ciudad de Rosario.

Como lo publicáramos en ediciones anteriores, 30 jóvenes de nuestra ciudad, acompañados de nuestro párroco Pedro Fournau y de un grupo de adultos, formaron parte de la delegación que participó del II Encuentro Nacional de Juventud el pasado fin de semana largo en la ciudad santafesina de Rosario, lugar que congregó a más de 18.000 jóvenes católicos provenientes de las distintas diócesis de todo el país que, con un gran esfuerzo y sacrificio, llegaron a esta ciudad para renovar la historia de la pastoral juvenil argentina y armar "lío" como lo pide el Papa Francisco
A pesar de la magnitud del evento y de haber transcurrido 33 años del primer encuentro (Córdoba 1985), los medios nacionales estuvieron ausentes en la cobertura de las distintas actividades que se desarrollaron.

Quizás esta ausencia de cobertura se debió porque más de 18.000 jóvenes no pintaron edificios públicos ni realizaron actos vandálicos, ni cortaron calles quemando cubiertas. Salvo medios del interior como La Capital de Rosario, El Liberal de Santiago del Estero, o de ciudades como Ayacucho (La voz) o de Avellaneda (Avellaneda24) y medios católicos (AICA), acercaron a sus lectores lo que acontecía en este mega encuentro juvenil argentino que tuvo como lema "Con Vos renovamos la historia".
Además de los trabajos que se realizaron en distintas sedes con charlas y talleres, la Peregrinación por la Patria, en un día tan especial para la Nación como el 25 de mayo y que partió del Monumento a la Bandera hasta el Hipódromo rosarino, dio comienzo a las actividades oficiales del II Encuentro Nacional de Juventud. Las calles de la ciudad de Rosario se llenaron de color: con jóvenes de todo el país que caminaron juntos y anunciaron: "Todos nosotros, junto a la Virgen, le decimos sí a la vida".
El ENJ2018 fue un llamado a "cuidar toda vida" sobre todo la vida del "joven vulnerable", además de constituir "un hito en la historia de nuestra patria que da testimonio de la Iglesia joven en la Argentina", señaló uno de los jóvenes durante la marcha. También se escucharon expresiones como "Debemos reunirnos y mostrar nuestro protagonismo", "Hoy en día los jóvenes somos re catalogados y queremos hacer notar nuestra voz. Venimos a demostrar que la juventud no está perdida". Y el Encuentro así lo demostró.

La presencia del Papa Francisco en el II Encuentro Nacional de la Juventud
Si bien el deseo de muchos era que Francisco asistiera al ENJ, su presencia se dio a través de un videomensaje a los encuentristas durante la segunda jornada. En su mensaje, Francisco aseguró que "cada joven puede renovar la historia" y puso como ejemplo a la Virgen María: "¡La renovó una chica de 16 años que en Nazaret dijo SI! ¡Podés renovar la historia!", manifestó.
"Donde hay jóvenes hay lio, por el amor hacia Cristo", dijo en otra parte el Obispo de Roma e instó a que la participación de los jóvenes "no sea sólo espuma, que sea jabón que hace espuma".
En su mensaje el Papa utilizando tres palabras: presencia, comunión y misión. Presencia porque "Jesús está con nosotros, está presente en nuestra historia, si no nos convencemos de esto no somos cristianos, camina con nosotros, aunque no lo conozcamos, pensemos en los discípulos de Emaús".
Comunión porque "no vamos solos escribiendo la historia, algunos se la creyeron, piensan que solos o con sus planes van a construir la historia; ¡Somos un pueblo! Y la historia la construyen los pueblos, ¡no los ideólogos!".

Misión porque se nos llama a ser "Iglesia en salida, en misión. Una Iglesia misionera, no encerrada en nuestra comodidades y esquemas, sino que salga al encuentro del otro".
En otro parte del mensaje, Francisco señaló: "Ustedes saben mejor que yo que las computadoras, los celulares, necesitan actualizaciones para funcionar mejor, también nuestra pastoral necesita actualizarse, renovarse, revisar la conexión con Cristo, a la luz del Evangelio; ese que desde ahora vas a llevar en el bolsillo y vas a leer dos minutos por día", refiriéndose al pequeño evangelio que se encontraba en la mochila que le dieron a cada uno de los encuentristas.

El desafío de renovar
la historia.
El cierre tuvo lugar pasado el mediodía del domingo 27 con una multitudinaria misa en un clima festivo, con mucha alegría, oración, fraternidad y compromiso. La eucaristía de cierre, estuvo a cargo de monseñor Oscar Ojea, presidente de la Conferencia Episcopal Argentina; el Cardenal Mario Poli, varios obispos entre los que se encontraban Fray Carlos Azpiroz Costa, Arzobispo de Bahía Blanca; y Mons. Pedro Laxague, obispo de Zárate-Campana y nacido en Coronel Pringles; además de la vicepresidente de la Nación, Gabriela Michetti y el subsecretario de culto de la Nación, Alfredo Abriani.
Durante tres los jóvenes trabajaron en centros de interés y el domingo por la mañana, en regiones pastorales. Los frutos de lo vivido y compartido, sobre las cuestiones que preocupan y ocupan a los jóvenes católicos, fueron resumidos en un mensaje final que se leyó después de la comunión eucarística. El documento, servirá como línea de trabajo que continuará en los próximos años en la pastoral juvenil.