Niegan beneficios a un condenado pringlense por la violación de dos menores

Carlos Montenegro purga una pena de 10 años. Buscaba acortar la sanción por estudiar en la cárcel -lo prevé la ley para algunos delitos- pero se lo rechazaron.

   La Cámara Penal rechazó el pedido de un condenado por abuso sexual para obtener el beneficio de acortar la pena por estudiar en el penal.

   De esa manera, la Sala I, con los votos de Pablo Soumoulou y Gustavo Barbieri, confirmó la resolución del juez de Ejecución Penal Nº 1, Claudio Brun.

   El fallo es contra Carlos Esteban Montenegro (64), a quien la justicia le impuso 10 años de prisión por violaciones sexuales en Coronel Pringles, y que entre 2011 -cuando se hizo el juicio- y 2015 estuvo prófugo, hasta que cayó en Villa Domínico, Avellaneda.

   Los hechos que se probaron en su contra tuvieron lugar entre agosto de 2002 y enero de 2003, en perjuicio de dos menores.

   Montenegro -a través de su defensor particular, Fernando Martínez- pretendía hacer valer los beneficios que marca la ley 12.256, de ejecución penal en la provincia de Buenos Aires, que permite, a modo de estímulo, una rebaja de pena a razón de 10 días por año de prisión a quien efectivamente haya trabajado o estudiado en el penal y tuviera conducta ejemplar.

   Consideraba "inconstitucional" que no se lo otorguen, aunque la Cámara opinó lo mismo que el juez de origen porque el artículo 100 de la misma norma impide cualquier tipo de beneficios para delitos graves, entre ellos los sexuales.

   "En este caso no se violenta principio constitucional alguno", sostuvo Soumoulou, con el apoyo de Barbieri.

LA NUEVA