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Aun sin tener casos de COVID-19, el virus se cobra una víctima: el sector comercial

04/05/2020
Aun sin tener casos de COVID-19, el virus se cobra una víctima: el sector comercial

Ya son varios los comercios locales que sufren los efectos económicos que conlleva la pandemia de COVID-19. Algunos se reinventan, pero otros deben inexorablemente cerrar sus puertas. Hoy: el cierre de Lo de Belo.

 

 


Lo de Belo, dedicado a la venta de indumentaria en calle Stegmann al 600, cierra sus puertas. El sector comercial en todo el país comienza a verse afectado por la pandemia de COVID-19, y Pringles no es la excepción.

"Esta pandemia fue algo inesperado, veníamos de un 2019 ´remándola´, las ventas ya no eran las mismas, y el virus terminó con todo. Tome una decisión que costó, pero creo que fue la mejor" explicó Sergio Darío Beloscar sobre el cierre de su comercio en el radio céntrico.

Con 7 años de experiencia en el rubro, Lo de Belo cierra sus puertas pero continua vendiendo la mercadería que tenía en stock, en forma online. Se pueden realizar consultas en la página de Facebook del local.

 

 

"Opté por vender online y deshacerme de una mochila, que es el pago del alquiler. No es lo que corresponde, es muy difícil. Todos sabemos que los talles, los modelos, no son todos iguales. Por ejemplo, si me pedís un jean de un determinado talle, tengo que llevarte muchos jeans para que elijas alguno. Pero la mercadería la tengo y de alguna forma la tengo que vender" señaló.

Analizando la situación, Sergio Beloscar tomó la determinación de cerrar, ya que se esperaban pocas ventas para lo que queda del año, y los costos a afrontar serian mayores.
"Uno tiene costos y compromisos que cumplir. Nunca me apuraron con la deuda de alquiler, pero decidimos cerrar igual. Creo que esto va para largo y se va a perder el año laboral, en muchos rubros va a afectar" remarcó el comerciante local.

"Hay que tratar de reinventarse y mantenerse. En lo que es venta de ropa, si hoy se levantara la cuarentena, no íbamos a tener 30 personas detrás de un local para comprar. La gente prioriza otras cosas, como alimentos o cuidar su salud" continuó. "No quise levantar la persiana y vender para pagar deudas, la decisión fue temprana porque sino iba a terminar hundido, con deudas de todo tipo. Y vender para pagar deudas es ilógico".
Beloscar indica que todo el sector comercial pringlense se encuentra en situaciones similares, luego de un 2019 que fue crítico.
"Veníamos de un 2019 crítico y esto (la pandemia) nos tomó por sorpresa a todos. Es muy triste tener que cerrar, ojala que nadie tenga que pasar por lo que uno pasa" finalizó.
ROGELIO GÓMEZ - EL ORDEN

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