Relato de una contagiada de Covid

Araceli Angladette hizo público lo que le sucedió. Fue una de las contagiadas de Covid en nuestro distrito, estuvo internada en el nosocomio local y, tras mejorar, finalizó su recuperación en su hogar

Una vecina pringlense contó las distintas etapas del proceso de la enfermedad de Covid que le tocó padecer, desde que comenzó con los primeros síntomas, hasta tener que ser internada por mareos fuertes o vértigo; hasta mejorar y poder terminar de recuperarse en su propio hogar.

Reproducimos el texto de Araceli, que compartió en las redes sociales.

"Mi nombre es Araceli Angladette, tengo 35 años. Hace 22 días atrás empezaba mi cuarentena, y la de mi familia, en total 4 integrantes. Ante un síntoma que era compatible con los del Covid- 19, que presentó mi primo, decidimos hacer el llamado a telemedicina; y como resultado inmediato quedamos en aislamiento preventivo.

Él fue el primero en sufrir de coronavirus; se mantuvo con fiebre alta durante una sola noche, de manera posterior a esto, perdió el sentido del olfato y un poco del gusto. Al día siguiente fui yo la que empezó con los síntomas, los cuales fueron dolor de cabeza y corporal. Dos días después, perdí de forma progresiva el olfato, hasta pasar más de una semana sin sentir olores, y también, presenté pérdida de gusto.

Del resto de los integrantes de mi familia, siendo éstos mi madre e hijo, solamente él fue quien no tuvo síntomas. Lo cual no indica que no tenga Covid- 19, sino que fue asintomático. Caso contrario fue el de mi madre, ella fue hisopada por presentar síntomas pero dio como resultado negativo; la explicación a esto es que se hizo demasiado pronto el testeo.

Dentro de nuestro hogar, antes y durante (y posterior a) la cuarentena obligatoria por ser positivos para Covid- 19, las medidas que adoptamos fueron cuidar la salud de mi mamá, que es una persona mayor y de riesgo. Personalmente, hoy no sé si fue por esto que hicimos que ella no presentó síntomas como mi primo y yo, o sólo pasó la enfermedad sin mayores problemas.

Dentro de mi cuarentena transcurrían con "normalidad" los días, y padecía los síntomas más comunes de esta nueva enfermedad, hasta llegar al día 12. Ese día me levanté con mareos, en ese momento no me preocupé, le resté importancia. De igual manera, ante todo este nuevo panorama, alerté al médico que seguía nuestro caso de lo que me pasaba.

Durante el transcurso de ese día no tuve ninguna otra complicación hasta llegar la noche, fue en este momento donde empezó lo peor para mí. A las 4 de la mañana me levanté al baño, y cuando volví a acostarme sentí que el suelo se movía, perdí el equilibrio. En ese momento mi hijo se despertó, al verme tan angustiada y asustada por la situación su primera acción fue agarrarme de la mano, como no me calmaba fue avisarle a mi mamá.
La despertó y ella llegó a la habitación, posterior a esto despertó a mi primo. Aclaro: él bajo ninguna razón salía de su cuarto. Entre los dos me quisieron incorporar pero no podía, sentía muchas náuseas y mareos, tenía sensación de vértigo. Cuando se dan cuenta de que lo que pasaba no era normal deciden llamar al médico. Él actuó de forma inmediata dando aviso al hospital, para que puedan asistirme.

Pasó un tiempo relativo (lo cual entiendo que sea así por los protocolos para atender a pacientes positivos para Covid- 19) hasta el momento en que llegó la ambulancia, los enfermeros que me asistieron evaluaron lo que pasaba y decidieron trasladarme al hospital.

Una vez allí, el doctor que estaba de guardia lo primero que observó fue la parte respiratoria, la cual estaba dentro de los parámetros normales, pero no sabían qué era lo que me pasaba. Una vez que logran ponerme las vías para el suero (acá me gustaría decir que al estar tan protegidas, a las enfermeras se les dificultó encontrar una vena para colocar el suero; no sé si fueron nervios de la situación o el equipo, o ambas, de todas formas les comuniqué no había problema que no me dolía, yo quería que se me pasara el vértigo) quede sola en la habitación (entiendo que es por el protocolo) pero allí fue donde me descompuse de la peor forma. Pedí ayuda pero no venía nadie, pero otra vez el protocolo.
Pasaron las horas y llegó el director del hospital a realizarme distintos estudios para poder determinar qué tenía; ecografías de corazón, saturación de oxígeno, presión arterial, fiebre y análisis de sangre. En ese momento me dieron más medicamentos para controlar el estado, pero con poco efecto. Al no tener comprometida la parte respiratoria, sumado a mis ganas de estar mejor y para no preocupar de más a mi familia, me dieron de alta en el hospital pero con seguimiento en el hogar.
La conclusión de los médicos que siguieron y estudiaron mi caso fue que estos nuevos síntomas relacionados al vértigo serían consecuencia del Covid- 19. Este virus atacó mi sistema nervioso, y por suerte, no el respiratorio.
Con medicamentos de por medio logré mejorar mi condición, y aunque todavía estoy en proceso de recuperación de aquellos últimos síntomas hoy, 2 de septiembre del 2020, recibí el alta médica (postergada) por ser paciente positiva en coronavirus.
Quiero agradecer a todo el equipo médico y no médico que nos asistió y estuvo presente todo el tiempo velando por todo lo que nos pasaba. En particular, quiero dar las gracias a Juan, Guillermina y Silvana.
Espero que estas palabras, mi historia en particular, sirvan para que aquellas personas que son incrédulas de la veracidad de esta enfermedad se lo replanteen. Quiero decirles que se cuiden, y que cuiden a los que quieren porque a veces se pasa sin pena ni gloria, y otras veces cuesta y duele ver que alguien cae por una imprudencia.

GRACIAS A TODA MI FAMILIA, EN ESPECIAL A MIS HERMANOS Y HERMANA QUE A PESAR DE ESTAR LEJOS SIEMPRE ESTUVIERON PENDIENTE DE TODO, A MIS AMIGOS QUE NOS ASISTIERON DURANTE ESTA CUARENTENA, Y A LAS PERSONAS QUE MANDARON UN MENSAJITO PARA SABER CÓMO ESTÁBAMOS, NOS SENTIMOS CUIDADOS POR TODOS.
¡MUCHAS GRACIAS!"

ROGELIO GÓMEZ - EL ORDEN