¿Querés que le escriba a tu mamá?

Trenes con combatientes de la guerra de Malvinas pasaban por Coronel Pringles en 1982, allí, Blanca Volpi de Padelli junto a otras colaboradoras les ofrecían algo de comer, beber y, lo que es mejor, la posibilidad de enviar un mensaje a sus madres.

"Yo llevaba un cuaderno, les pedía direcciones, y les decía: ¿querés que le escriba a tu mamá?" cuenta Blanca, quien será una de las vecinas distinguidas de nuestro medio reconocimiento que se hará efectivo en el Aniversario de Coronel Pringles.
Blanca cuenta la historia de este cuaderno, que hoy toma mucha relevancia por las historias que contiene.

"En esto no llegué por casualidad sola, tengo que agradecer al Club de Leones que me aceptaron para trabajar con ellos, la idea fue de ellos, el presidente en esa época era Suárez. Un día me habla el Vasco Iriarte, si quería ayudar, le dije que sí. Formé mi equipo, con Aduriz, Montesano, Suárez, Pennini. Éramos cinco, íbamos a ayudar y esa cocina tenia de todo. La gente de Pringles fue muy solidaria" reconoció.

El tren paraba en la estación local, durante aproximadamente una hora.

"En cada tren venían unos 200 soldados, les decíamos que bajaran con su jarrito para poder servirles de comer y beber. Pero mi idea era otra: conectarlos con sus mamás. Llevaba un cuaderno, les pedía direcciones, y les decía: ¿querés que le escriba a tu mamá?".
Fue así que Blanca, de puño y letra, redactaba cartas para las familias, las madres de los soldados que le brindaban sus datos. Y esas cartas eran respondidas con gratitud.

"Esas madres me agradecían, sabían que sus hijos iban a Malvinas, pero no por donde pasaban. Escribía unas 7-8 cartas por tren, me iba al correo, las enviaba, y a los días recibía las contestaciones".

Algunos soldados que estuvieron en el continente, volvieron a pasar por Pringles, y lo hicieron con sus familias.

"No saben lo emocionante que fue vernos de nuevo, el primer regimiento que vino en el regreso fue el Regimiento de Tanques de Olavarría" precisó Blanca, quien registraba la hora en que pasaba el tren y la cantidad de soldados que viajaban en él. También anotaba los nombres de cada soldado y la dirección y nombre de sus mamás.

"A los soldados también se les preguntaba si necesitaban abrigos. La gente de acá tejió muchas bufandas, una pena que no haya fotos. En la única parte del recorrido que se los atendió así, fue acá en Pringles" aseguró.

Sobre este cuaderno, mencionó que es referente de la gesta de Malvinas en Pringles, y salió a la luz tras una nota realizada por José María Martel, hace dos años.

EL RECONOCIMIENTO COMO VECINA DISTINGUIDA

"Me siento emocionada, pero con un gran compromiso. No creo merecer ser vecina distinguida" cuenta en principio Blanca, en nota con Julio Torreguitart.

"Tengo mucho que agradecer: en primera instancia al Sr. Intendente (Lisandro Matzkin) y al Ejecutivo que pusieron la mirada en mí. También a los concejales por lo que dijeron sobre mi persona, agradecer también a mis amigas, al periodismo que ha sido muy generoso conmigo, al grupo de Malvineros Pringlenses (a Andrea Lageyre, Alejandra, a Lorena González), lleve el cuaderno a una reunión y cuando se hizo el sexto encuentro nacional de veteranos en el balneario, lo iniciaron con un video mío. Al Grupo Huellas, quedó plasmado cuando se le hizo el monumento a Rodríguez, el mural con mi persona escribiendo las cartas".
Y continuó: "me da un poco de temor decir algunas palabras, ser vecina distinguida no es cualquier cosa, me parece que no era para tanto. Mis hijos y nietos todos contentos, es algo muy lindo, pero no deja de ser un compromiso grande" finalizó.