El hecho ocurrió en una escuela de Brandsen y la joven mamá y estudiante realizó un posteo en su cuenta de Facebook.
La historia que compartió Ludmila Disante en su Facebook se volvió viral por varias cuestiones que interpelan a la sociedad de estos tiempos: el rol de los varones en la crianza y los cuidados, la ruptura de mandatos y el hecho de pensar una escuela verdaderamente inclusiva.
Ludmila Disante tiene 18 años, estudia en la Escuela Media N°1 de Brandsen y es mamá de una beba de tres meses. Su historia se volvió viral en las redes sociales y llegó a los medios cuando compartió una publicación en la que le agradece a su profesor de Economía Política el hecho de haber acunado a su hija, a quien llevó a clase, mientras ella terminaba su tarea.
Federico Tenreyro es el profesor en cuestión que no tuvo reparo en aceptar a la niña en el aula, alzarla e incluso hacerla dormir.
“Le agradezco a este profe que me tuvo mi nena mientras yo estudiaba. La verdad, un genio total, todas las escuelas tendrían que tener profes así. Para que todas las chicas que son mamá y quieren terminar los estudios puedan. No tengo palabras para agradecerle”, escribió Ludmila en su Facebook y posteó la foto de Tenreyro con la beba.
“Encima que la cuidó mientras yo estudiaba también la hizo dormir. Lo aplaudo profe, la verdad un GENIO!!!! Por más profesores así, para que todas aquellas mamás puedan terminar el colegio”, apuntó.
Lo cierto es que la historia replica muchas realidades que se viven en las escuelas del país, por eso caló en la sensibilidad de los usuarios de las redes primero, y en los espectadores de televisión después. “Una de mis tías me dijo que la publicara en Facebook, así la gente la veía. Empezaron a mandarme mensajes, a compartirlo demasiado”, contó Ludmila en diálogo con el canal Todo Noticias.
La escena, además, ocurrió un sábado, en las clases de apoyo a las trayectorias educativas dispuestas para recuperar contenidos no abordados durante la pandemia por algunos estudiantes con problemas de conectividad o de continuidad. “El profe la alzó y le cantó hasta hacerla dormir. Es el último año que tengo que cursar, si Dios quiere y me ayudan a terminar todas las materias”, dijo la joven. (DIB) ACR