Historias de bomberos locales

Una vida de dedicación, de ayuda, de amor al prójimo. El bombero, en activo o reserva, siempre lo seguirá siendo. En FM Ciudad, tres bomberos locales contaron cómo ingresaron al cuerpo y las vivencias dentro del cuartel.

 Carlos Eceiza, Nestor Hugo Bottini y Daniel Bertolotto estuvieron presentes en la mesa de La Voz del Orden.

"Ser bombero es mi vida, entré de joven y estuve más de la mitad de mi vida adentro. No pude hacer el servicio militar, y me costó entrar al cuartel si no me acompañaba alguien" cuenta Carlos, con su timidez característica, a quien le costó entrar en confianza con sus compañeros.

 "Siempre fui tímido, me costaba entrar a un grupo de 60 bomberos. Pero después se va transformando en una familia y cuando entras, no te queres ir más".

En el caso de Nestor, se sumó a bomberos y prestar servicio le permitió además confirmar sus condiciones para una carrera vital en el aspecto de la salud.

"De chico quería ser bombero, a los 18 por un par de compañeros se me ocurrió que podía ser útil a la comunidad y lo hice. Además me dio oportunidad de hacer una carrera exitosa, al encontrarme ante un accidente, dedicarme a la enfermería fue mi segunda función cumpliendo servicio en el hospital".

 Y así como Carlos trata de evitar concurrir a accidentes, ya que le cuesta luego olvidarlos, a Nestor y Daniel, todo lo contrario.

 "La situación de impotencia al llegar a un accidente y no poder hacer nada, fue lo que me llevó a practicar la enfermería" dice Néstor; y agrega Daniel: "a mí me gustaba estar en el lugar del accidente".

"Fui uno de los primeros en llegar al del colectivo de Lobos. Estábamos sacando gente de adentro y el recuerdo es una chica sentada, a la que veías como si estuviera normal, con los ojos abiertos. Pero donde la sacamos tenía una abertura en el medio del pecho, por la cual había fallecido" relató.

 A Carlos todavía le queda el recuerdo de un incendio enorme en una refinería de Punta Alta.

 "Explotó un tanque de combustible. Y siempre miedo tenes, pero estamos preparados para trabajar con eso" detalló.

 Antiguamente, dicen que se encontraban en una situación mas crítica en cuanto a las comunicaciones, y también en el material de trabajo.

 "Antes tocaba la sirena y no sabías qué pasaba hasta llegar al cuartel" cuenta Nestor.

 "Cuando entramos, los móviles eran muy precarios y se reciclaban, también los uniformes eran muy elementales. Pero era lo que había en el momento, en todos los cuarteles" agrega Daniel.

 Este último, destaca el ingreso de las mujeres a los cuarteles de bomberos: "están igualmente capacitadas que un varón, y me alegra que estén".

 Y finalmente, señala que el 2 de junio es un día para celebrar, a lo grande.

 "Es un día que esperamos durante todo el año, y tiene más emocion que el resto de los días".

 Escuchá la nota completa en FM Ciudad Pringles.

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 ROGELIO GÓMEZ - EL ORDEN